Puppet Master (1989) El culto al Pulp.

Blade es un icono del género de terror, la simpleza no quita que los pequeños detalles, hicieran la diferencia entre ser memorable o una criatura del montón, en un entorno rodeado de películas con mucho más presupuesto.

Por: Deadman.
Twitter: @AzraelHell


Si me pidieran explicar el éxito y el por que Puppet Master se hizo una película de culto en el saturado cine de terror en  los 80, yo comenzaría por decirles que es un triunfo de narración y esencia sobre presupuesto y distribución. Puppet Master nace de hecho de un fracaso económico de Empire Pictures, creación de Charles Band (también creador del concepto Puppet Master) y la reciente fundación de Full Moon productions, quienes aprovecharon el "Boom" de taquilla que fue "Re-Animator" (USA, 1985) que con un presupuesto bajísimo y con un guión adaptado e inspirado de un cuento de Lovecraft  de manera estrambótica  que rompió records de taquilla y dejó a un nuevo público que pedía a gritos más ideas de ese corte.

Fue hasta que Paramount Pictures y Pioneer Home Entertainment entraron al proyecto que se comenzó en forma a dar inicio al larguísimo camino que ha sido (aún no concluye) Puppet Master que con una franquicia consolidada y un legado importante en el género del terror, nos recordó desde 1989 que a veces es mejor salir con una idea fresca y honesta que con un presupuesto enorme pero hueco... y sin más preámbulo si están listos a tomar el sendero de las marionetas de Andre Toulon y el homenaje que hace Charles Brand a la cultura Pulp es tiempo de que comencemos!

Jester es para muchos fans, los ojos de Toulon, la marioneta que recibió su espíritu o su voluntad.

Andre Toulon descubrió en la cultura del antiguo egipto, el secreto de dar vida en objetos inanimados... y no estuvo dispuesto  a compartirlo con nadie...

Plot

La historia comienza con un dedicado titiritero, Andre Toulon terminando los últimos detalles de lo que es su última marioneta en vida a la que bautiza como "Jester", a quien vemos cobrar vida en manos de Toulon, entonces vemos desde la perspectiva de una de sus marionetas animadas, el arribo de dos asesinos que van en la firme intención de asesinar al anciano y robar la fórmula de la vida que posee, la marioneta que da aviso a Toulon es "Blade", Andre lejos de sorprenderse comienza con prisa, pero sin perder el cuidado y la dedicación a guardar y esconder a todas sus marionetas con vida, a ocultar de sus verdugos cualquier indicio de la fórmula y de los muñecos mismos... a unos metros de su ingreso a la habitación de Toulon, éste se suicida poniendo un revólver en su boca y accionando el gatillo.

Han pasado 50 años desde entonces, entonces un grupo de psíquicos reunidos por Neil Gallagher se congregan para investigar los secretos de Toulon y así hacerse con la vida eterna y el poder que implica dotar de vida cualquier objeto inanimado, sin embargo las marionetas del misterioso titiritero tienen pensado proteger el secreto de su amo y parecen tener a su vez, sus propios planes, la carnicería de los títeres de Toulon está a punto de comenzar...

Puppet Master tiene de todo: Terror, misterio, humor negro y hasta atractivo visual en escenas eróticas, pero todo siempre en un entorno de homenaje a la cultura Pulp, desde la ambientación hasta la música.

Crítica y comentario:

Sería pertinente como casi siempre, entender el contexto en el que las películas son lanzadas, así pues nos podemos dar cuenta que en 1985 "Re-Animator" fue una película muy exitosa y lo estrambótico de sus efectos especiales y lo bizarro del argumento hizo que muchos directores pensasen que si una película así podía cautivar de esa manera a la audiencia, cualquier cosa podría por probabilidad, funcionar de igual manera, un año antes "Child's Play" cimbro a los fans del terror e hizo de Chucky un icono del terror (otro muñeco) y un año antes "Dolls"  (1987) emocionó a una público que comenzaba a saturarse de cintas "slasher" que ya caían en lo repetitivo. Ante este entorno, un quebrado Charles Band quien al fin había encontrado socios estables para sus ideas, en conjunto con David Schmoeller y Kenneth J. Hall (quienes re escribieron gran parte de la historia) empeñaron en Puppet Master, las expectativas de arrancar una (al fin) exitosa franquicia que sembrara y cosechase una abundante cifra de fans que respaldasen en general, la recién nacida Full Moon productions.

¿Cumplió Puppet Master con las expectativas del director Schmoeller y de Charles Band? con nueve secuelas, múltiples artículos de mercadotecnia que van desde ropa, juguetes (obvio) y un larguísimo número de afiches y artículos coleccionables que cotizan alto al día de hoy en sitios como E-bay... yo diría que si, eso sin contar el etiquetado popular que ya tiene como película de culto, ejemplo de lo bien que a veces salen las cosas con presupuestos tan bajos de manera prácticamente independiente.

Los efectos especiales están muy bien logrados, a pesar de haber estado tan limitados en presupuesto, la ayuda y asesoría de un médico forense en la filmación fue una ayuda invaluable para añadir un toque realista en las lesiones letales que provocan la muerte de los personajes principales. 

Como película, fuera de su contexto exterior y mirando únicamente a la cinta como tal pues, es como muchísimas películas de clase B en el multi colorido cine de terror de la década de los 80, el guión no es muy profundo, no tiene muchos misterios que tengan al publico tratando de armar en la butaca un puzzle mental y deduciendo respuestas a múltiples acertijos y enigmas, es mas bien una historia simple que funciona muy bien gracias a la dedicación de el equipazo de Mark Rappaport, el verdadero Andre Toulon que dio vida a las marionetas con su conocimiento en animatronicos y el maquillista Patrick Simmons (Les invito a ver el historial de producciones de ambos), quienes trabajaron en franquicias tan emblemáticas como "A Nightmare on Elm Street", "Halloween", "Friday the 13th" y hasta en películas muy recientes como "TED" (USA 2012) y "300" (USA 2006) no cabe duda que Puppet Master tuvo una mancuerna épica encargándose de los efectos especiales.

Las actuaciones son sólidas, breves y elementales, pero funcionan, en especial toca mención positiva para Jimmie F. Skaggs en el papel del villano Neil Gallagher quien nos regala de lejos, la mejor actuación dentro del filme, también es necesario mencionar a Paul Le Mat quien hace lo que le corresponde en la historia, todo lo demás es crédito de los muñecos, del contexto siempre tenso de la ambientación y la música de Richard Band que si bien no integró a la película una obra maestra como banda sonora, si que cumple también de manera sobria el propósito de marcar de manera efectiva, el mood en que el director buscó ambientar las escenas, pasando por melodías monótonas y estresantes en los momentos de mayor crispación y angustia, hasta melodías aparentemente inocentes que dan una sensación de un falso descanso del peligro siempre presente.

La mujer sanguijuela es un ejemplo perfecto y bien administrado por el director de como un juguete tan pequeño, tan aparentemente inocente y divertido (en instantes hasta tierno) como es la pequeña muñeca, puede en un instante de manera fría y amoral, convertirse en un vehículo del dolor, del miedo y la impotencia que como víctima, se está por padecer cuando ésta pequeña pesadilla se dispone a asesinar.

El resto de la película ( y creo que es para bien ) se lo llevan las marionetas, que son en sí la razón por la cual vale la pena la película, son personajes increíbles y maravillosos dentro del género de terror ya que sin un solo diálogo, de manera muchas veces pasiva o teatralmente activa, se roban cada instante en el que están a cuadro, son quienes se llevan el recuerdo de los fans quienes aún a al fecha siguen pidiendo más y más material de las creaciones de Andre Toulon, describir a todas y cada una de estas criaturas es innecesario, cada marioneta es única y tiene su personalidad propia bien definida, a veces son villanos inclementes, a veces fungen solo como espectadores y otras tantas son anti héroes, impartiendo una especie de justicia que solo podría tomar un sentido completo a los ojos de su creador.

El movimiento de las marionetas se basó en dos técnicas principalmente, el uso de animatronicos y el recurso de la animación cuadro por cuadro, capturando pequeñas variantes de movimiento, que desde hacía décadas era la única manera de lograr efectos así.

Pinhead fue la excepción en Puppet Master, fue básicamente interpretado por una actriz con enanismo, Cindy Sorensen fue la encargada de dotar de vida los puños inclementes de una de las marionetas más agresivas de Toulon. 

En resumen, Puppet Master es una película de referencia en el sub género de los muñecos dentro del inmenso mundo del terror, es una cinta ineludible para entender como podemos extraer una visión perturbadora aún de aquellas cosas que de origen, están pensadas en proporcionar placer, diversión y entretenimiento, no es una maravilla que te hará dar vueltas en la cama por la noche, no te hará ver por sobre de tu hombro mientras la paranoia te consume con solo recordar las escenas de esta cinta, pero cumple a la perfección el propósito de entretener, mantener un nivel de tensión y de sorpresa, cosa que ahora es cada vez más difícil de lograr en los filmes de terror modernos.

Muy recomendada para una tarde en la que quieras reír, asombrarte y descubrir un ángulo distinto del genero del terror y conocer a un director como Charles Band que fue y es aún, influencia en las nuevas generaciones de creativos, directores y amantes de las películas B, me despido dejando un breve pero maravilloso "detrás de cámaras" de esta película, esperando como siempre, que lo disfruten tanto como yo.

Mientras tanto me despido esperando nos leamos en la próxima entraga. ¡Hasta entonces!